La importancia de la nutrición en la salud

Según la OMS “la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.

Hay que tener siempre en mente que el cuerpo envejece no solo por fuera sino también por dentro. Y como lo confirma OMS hasta el 50% de la salud humana está influenciada por el estilo de vida, que incluye una dieta y actividad física adecuada. Con la edad, las necesidades del cuerpo cambian en términos del micro y el macronutrientes necesarios. Envejecimiento es un proceso irreversible pero su curso pude ser modificable gracias a una buena dieta en la edad adulta.

¿Cómo? Gracias al ejercicio y la dieta! La dieta es muy importante en toda nuestra vida pero más en la edad adulta. Una buena dieta puede reducir significativamente el riesgo de enfermar y ser un elemento fundamental para alargar la vida y buena forma física como mental.

Somos conscientes de que no existe un producto alimenticio que proporcione todos los nutrientes esenciales para proteger del envejecimiento. La forma en la que se alimentan nuestros mayores, la elección de alimentos que compran y la preparación de los mismos tiene un gran impacto en el bienestar y estado de ánimo. También garantiza el nivel correcto de energía para el funcionamiento diario. Por eso es tan importante comer alimentos de varios grupos, es decir, comer verduras, frutas, cereales, carne, pescado, leche y sus productos (yogur, suero de leche, kéfir) en las cantidades adecuadas. El menú de las personas mayores de 65 años debe ser variado, proporcionando la comida más nutritiva.

Los principales errores en la nutrición de los mayores

  • Falta de la cantidad recomendada de comidas, salazón o edulcoración excesiva de los alimentos, picoteo entre comidas;
  • Monotonía de la nutrición y el consumo de comidas invariables;
  • Demasiado bajo consumo de alimentos que promueven la salud mientras que alto consumo de azúcar, sal, grasas no saludables;
  • Valor nutricional inadecuado de los alimentos consumidos;
  • Contenido demasiado bajo de ingredientes pro-salud en la dieta.

La variedad de la dieta es la clave para la salud. La nutrición adecuada es un factor que determina el rendimiento tanto físico como intelectual. Recordemos que una correcta nutrición debe entenderse como la ingesta adecuada de nutrientes, la satisfacción de las necesidades energéticas y la selección de productos alimenticios específicos en la dieta diaria.

juegos de nutricion

10 reglas de alimentación saludable para personas mayores

  1. Consumir comidas con regularidad (5-6 cada 2-3 horas). Beber líquidos al menos 2 litros al día, beber con frecuencia, en pequeños sorbos, incluso cuando no se tiene sed. Esto evitará que el cuerpo se deshidrate.
  2. Comer verduras y frutas con la mayor frecuencia posible, al menos la mitad de lo que se suele comer. Parcialmente 1-2 porciones, se puede sustituir con jugos (200-400 ml). Si no se tolera bien, las verduras y frutas se pueden comer trituradas o en forma de jugos.
  3. Usar productos a base de cereales, especialmente cereales integrales.
  4. Consumir productos lácteos a diario, en su mayoría fermentados (yogures, kefir), al menos 3 vasos. Puede reemplazarse parcialmente con queso.
  5. Comer pescado, huevos, carnes magras y legumbres. Elegir aceites vegetales. Limitar consumo de carnes rojas, productos cárnicos procesados ​​y grasas animales.
  6. Evitar comer azúcar y dulces (reemplazar con frutas y nueces). Evitar beber bebidas azucaradas.
  7. No agregar sal a sus alimentos y adquirir productos bajos en sal. A cambio se puede usar hierbas. El uso de hierbas frescas o secas para condimentar platos permite limitar la adición de sal y aumenta el sabor, aroma y atractivo visual de las comidas.
  8. No consumir alcohol.
  9. Complementar la dieta con vitamina D diariamente y vitaminas y minerales necesarias tras consultar al médico o nutricionista.
  10. Mantenerse activo física y mentalmente todos los días. Incluso el ejercicio en una silla o en una cama (hecho solo o con la ayuda de otros) trae beneficios para la salud. Involúcrarse en cualquier actividad social que dé satisfacción.

La pirámide de alimentación como la base de todo

Para definir bien la alimentación de todas las personas el Departamento de Agricultura de EE. UU creó la Pirámide de la alimentación que fe actualizada en 2011.

La pirámide de la alimentación saludable define bien el consumo de los productos. Su versión actual es una respuesta a las recomendaciones de la OMS, que incorpora la idea de «Menos azúcar, sal y grasa, más fibra”. La pirámide es una de las herramientas más eficaces para todos y ante todo para las personas mayores. Es importante de enseñarles usarla, ya que así pueden aprender cómo debe ser la alimentación, saber dividir los grupos de alimentos y clasificarlos según su frecuencia de consumo.

Estudios recientes demuestran sin lugar a dudas que las verduras y frutas deben ser la base de nuestra nutrición.

Proporcionan muchos ingredientes invaluables (minerales, vitaminas, polifenoles) y reducen significativamente la morbilidad y mortalidad por enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer, y prolongan la vida útil de las personas. Por estas razones, las verduras y frutas están en la base de la pirámide.

Con esta información se crean juegos de nutrición para nuestros residentes, que son muy atractivos ante todo para los que tienen el apetito disminuido.

juegos de nutricion

Juegos de nutrición para comer más y mejor

La falta de apetito, las enfermedades, los problemas dentales y la discapacidad física son todas las razones por las que nuestros mayores pueden tener la nutrición inadecuada. En nuestra Residencia intentamos crear varios juegos de nutrición a lo largo del día para enseñar comer bien, para ayudar a la ingesta de los alimentos adecuados y para aumentar el apetito de nuestros residentes.

Aquí ejemplos de juegos de nutrición que se pueden realizar y ayudan a una buena alimentación:

Poner la mesa:

Se usa el gráfico de la pirámide de alimentación adaptado por los científicos en nutrición de la Universidad de Tuft para mayores. Este gráfico contiene un plato con su adecuada división por secciones. Cada una de ellas contiene productos específicos y sus cantidades. Aborda cuestiones de nutrición específicas de las personas mayores, como la hidratación adecuada y la diversidad dietética (de productos frescos, congelados, secos o con bajo contenido de sodio, cereales integrales y alimentos proteicos como tofu o pescado. También contiene imágenes de tazas de café, vasos de leche, jugo y agua etc.

Es uno de los más clásicos juegos de nutrición, consiste en pegar las pegatinas con cada tipo del producto en la parte que le corresponde. A falta de pegatinas se puede pedir a nuestros mayores que dibujen o escriban lo que debe ir en cada parte del plato. De este modo aprenden la teoría, que después ponen en práctica. Mientras dura el juego nuestros cuidadores corrigen los errores y proporcionan una adecuada explicación.

Estación de nutrición:

Se enseña a través de una representación visual de un plan de alimentación saludable. Preparemos una mesa con representantes de cada grupo de alimentos medidos en los tamaños de porción recomendada. Por ejemplo los mayores necesitan de 1,5 a 2,5 de tazas de fruta por día. Llenamos las tazas medidoras con fruta cortada y los mayores deben adivinar si la ración es la correcta o no añadiendo o quitando el producto.

Hacer comparaciones:

De entre los juegos de nutrición este permite aprender las proporciones sin la necesidad de pesarlas. Con el uso de las tarjetas con los nombres de los alimentos y con objetos comunes. El objetivo de la actividad es comparar las porciones de alimentos adecuadas con artículos de tamaño similar. Por ejemplo, una porción de carne de 3 onzas es aproximadamente del tamaño de una baraja de cartas. Una porción de arroz, pasta o helado no debe superar la mitad de una pelota de béisbol. Una pelota de ping pong tiene aproximadamente el tamaño de 2 cucharadas de mantequilla. Es muy divertido y visual. Repitiendo la actividad con mayor frecuencia ayuda a aprender los tamaños y el volumen de los alimentos.

Presentar los platos de forma apetecible:

Enseñar a los mayores como preparar la mesa de manera divertida y apetecible. Preferible ofrecer un plato pequeño en el que solo se vea uno o dos alimentos para que la persona mayor lo perciba como algo ligero y fácil de comer.

Conclusión

A cualquier edad, podemos fortalecer nuestra condición, ¡ya sea que tengamos 40 o 70 años! La forma más sencilla es a través de los nutrientes seleccionados que pueden provenir de una nutrición inadecuada. Comer bien es muy importante pero saber que comer, cuando y como puede ser primordial a la hora de alimentar a nuestros mayores. Disfrutemos de los momentos de estar juntos y hagamos la vida más fácil a nuestros familiares. ¡Buen provecho!

Referencias: