Tomar la decisión de si una persona mayor con demencia debe permanecer en su hogar o ingresar en una residencia especializada no es sencilla. Las familias suelen enfrentarse a un dilema que mezcla factores emocionales, logísticos y de salud. Este artículo ofrece una guía clara y equilibrada para ayudar a valorar la mejor opción según cada situación.

¿Qué es la demencia y cómo afecta al día a día?
La demencia es un síndrome caracterizado por la pérdida progresiva de las capacidades cognitivas, que afecta principalmente a personas mayores. Los tipos más comunes, son:
- Enfermedad de Alzheimer
- Demencia vascular
- Demencia por cuerpos de Lewy
Estos trastornos alteran la memoria, el razonamiento, el comportamiento y la capacidad para realizar tareas cotidianas. Esto hace que, con el tiempo, la persona mayor pueda necesitar un nivel creciente de apoyo para garantizar su seguridad y bienestar.
Factores clave para decidir: ¿cuidado en casa o residencia especializada?
Cada familia es diferente, y también lo es cada situación. No existen dos personas mayores con demencia que presenten exactamente las mismas necesidades, ni dos entornos familiares que cuenten con los mismos recursos o capacidades para ofrecer cuidados adecuados. Por eso, antes de tomar cualquier decisión, es fundamental realizar una valoración individualizada que contemple no solo el estado de salud de la persona mayor, sino también las circunstancias personales, sociales y emocionales de su entorno.
Estado de salud y nivel de dependencia
El avance de la demencia determina el grado de apoyo necesario. En fases iniciales, es posible que la persona mayor pueda vivir en casa con cierta autonomía. Sin embargo, cuando el deterioro es mayor, se incrementan los riesgos asociados a la desorientación, caídas o problemas de salud.
Capacidad familiar
La disponibilidad horaria, los conocimientos para proporcionar cuidados adecuados y la fortaleza emocional de la familia son determinantes. La sobrecarga física y emocional es común en cuidadores no profesionales.
Recursos económicos y ayudas disponibles
Valorar si la familia puede asumir los costes de una residencia para personas con Alzheimer, acceder a plazas concertadas o contratar apoyo domiciliario.
Acceso a servicios y terapias profesionales
En muchos casos, aunque existan servicios médicos o terapias externas disponibles en el entorno, estos no suelen ser suficientes para cubrir las necesidades específicas y continuadas de una persona mayor con demencia. Las residencias especializadas ofrecen no solo acceso permanente a profesionales sanitarios y terapias adaptadas, sino también un entorno estructurado, seguro y diseñado específicamente para garantizar el bienestar físico, cognitivo y emocional. Esto convierte a las residencias en la opción más completa y sostenible a largo plazo, especialmente cuando el grado de dependencia aumenta y la atención domiciliaria resulta insuficiente para cubrir todas las necesidades.
Calidad de vida y bienestar emocional
El aislamiento social, la falta de actividades estimulantes o el agotamiento familiar pueden afectar tanto a la persona mayor como a sus seres queridos. Por ello, las residencias para personas mayores, como las de Colisée, ofrecen un entorno que favorece la interacción constante, actividades adaptadas y apoyo emocional tanto para los residentes como para sus familias. Estos centros están diseñados para garantizar un envejecimiento activo y una atención integral que no siempre es posible replicar en el hogar, asegurando así un mayor bienestar físico y emocional.
Ventajas y desventajas del cuidado en casa
Ventajas:
- La persona mayor permanece en su entorno conocido.
- Mayor sensación de control por parte de la familia.
- Flexibilidad en rutinas y horarios.
- Posibilidad de personalizar los cuidados.
Desventajas:
- Alta carga física y emocional para el cuidador principal.
- Necesidad de adaptar el hogar para garantizar seguridad.
- Dificultad para acceder a terapias y atención especializada.
- Coste adicional si se contratan cuidadores externos.
Ventajas y desventajas del cuidado en residencia especializada
Ventajas:
- Atención profesional 24 horas.
- Instalaciones adaptadas y seguras.
- Programas de estimulación cognitiva, socialización y fisioterapia.
- Descarga de la responsabilidad familiar.
Desventajas:
- Adaptación emocional difícil para algunas personas mayores.
- Coste económico elevado.
- Sensación de distancia física de la familia.
Tabla comparativa: cuidado en casa vs residencia
Aspecto | Cuidado en casa | Residencia especializada |
Atención personalizada | Alta (si se dispone de recursos) | Alta, con profesionales especializados |
Carga para la familia | Alta | Baja |
Coste económico | Variable (según servicios externos contratados) | Fijo, suele ser elevado |
Seguridad y adaptación del entorno | Depende de las adaptaciones realizadas en el hogar | Alta, instalaciones adaptadas |
Acceso a terapias y profesionales | Limitado, depende del acceso a servicios externos | Incluido: terapias, personal sanitario y actividades |
Vida social y estimulación | Limitada (según familia y entorno) | Amplia, con actividades grupales y convivencia diaria |
¿Cuándo considerar una residencia? Señales claras
- Deterioro avanzado de la salud y dependencia total.
- Episodios frecuentes de desorientación o conductas peligrosas.
- Falta de seguridad en el hogar.
- Sobrecarga física y emocional del cuidador.
- Falta de socialización o estimulación.
Consejos prácticos para facilitar la transición a una residencia
- Involucrar a la persona mayor en la decisión siempre que sea posible.
- Realizar visitas previas a varias residencias para elegir la más adecuada.
- Personalizar el espacio (habitación, objetos personales, rutinas conocidas).
- Mantener el contacto familiar frecuente: visitas, llamadas, actividades.
Si deseas conocer de primera mano cómo puede ser la experiencia de adaptación en una residencia, te invitamos a leer este caso práctico real en nuestro blog:
«Mi madre no se adapta a la residencia: caso práctico«. En él, verás cómo gestionamos situaciones complejas y ayudamos a las familias y personas mayores a sentirse acompañadas en todo momento.
Preguntas frecuentes
Cambiar de casa a una persona mayor con Alzheimer es una decisión que debe tomarse con cuidado. Aunque mantenerse en un entorno familiar puede proporcionar tranquilidad en etapas iniciales, en fases avanzadas el cambio puede ser necesario para garantizar su seguridad y bienestar. Las residencias para personas con Alzheimer, como las de Colisée, ofrecen espacios adaptados y personal especializado, facilitando una transición más segura y positiva. Si el hogar ya no puede ofrecer los cuidados adecuados, optar por una residencia puede ser la mejor opción para preservar la calidad de vida.
No es recomendable que una persona mayor con demencia viva sola. La pérdida de memoria, la desorientación y los cambios en el comportamiento pueden aumentar significativamente los riesgos dentro del hogar, desde caídas hasta olvidos peligrosos. Las residencias para personas con demencia ofrecen un entorno seguro, supervisión constante y programas diseñados para mantener la salud física y cognitiva, minimizando los riesgos y asegurando una atención adecuada.
Las residencias especializadas en Alzheimer o demencia son la mejor opción para garantizar el bienestar de las personas mayores que conviven con esta enfermedad. En centros como Colisée, el personal está formado específicamente en el cuidado de personas con demencia, y se ofrecen programas terapéuticos personalizados, fisioterapia, estimulación cognitiva y actividades sociales adaptadas. Todo ello en un entorno seguro y diseñado para promover la calidad de vida y el bienestar emocional tanto del residente como de su familia.