La Ley de Dependencia en España nace de la necesidad de establecer un sistema integral de atención residencial a personas mayores en una situación de dependencia.
Ésta tiene como objetivo fomentar la autonomía personal y proporcionar un soporte financiero; además de apoyar a los cuidadores y a los familiares mediante recursos y formaciones.
¿A quién está dirigida la Ley de Dependencia?
La Ley de Dependencia en España, conocida como Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, “tiene por objeto regular las condiciones básicas que garanticen la igualdad en el ejercicio del derecho subjetivo de ciudadanía a la promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia.”
Tienen derecho a beneficiarse de esta ley todas aquellas personas mayores dependientes que tengan alguna limitación por razones de edad, enfermedad o discapacidad y que precisen de ayuda para la realización de sus tareas diarias.
La Ley cataloga tres grados de dependencia:
- Grado I o Dependencia Moderada
La persona mayor precisa de ayuda básica para realizar tareas puntuales de su día a día – como asearse o ir a la compra – aunque sus necesidades de apoyo son intermitentes y puntuales.
- Grado II o Dependencia Severa
El adulto mayor necesita ayuda de forma más recurrente, sin embargo todavía no le hace falta un cuidador permanente para su autonomía personal.
- Grado III o Gran dependencia
En estos casos la atención y ayuda de un cuidador es indispensable para la persona, ya que precisa de ayuda varias veces al día.
Prestaciones y servicios
La ley contempla diferentes prestaciones y servicios para las personas mayores dependientes:
- Servicios de prevención de situaciones de dependencia y de promoción de la autonomía personal.
- Servicios de teleasistencia.
- Servicios de ayuda a domicilio.
- Servicios de centro de día y de noche.
- Servicios de atención residencial.
- Prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar.
- Prestaciones económicas vinculadas al servicio.
- Prestaciones económicas de asistencia personal.
Requisitos para solicitar la Ley de Dependencia
Para solicitar formalmente la Ley de Dependencia es indispensable cumplir con los siguientes requisitos:
- Encontrarse en una situación de dependencia dentro de los grados enumerados.
- Residir en el territorio español y, por lo menos, haberlo hecho en los últimos 5 años.
La Ley de Dependencia y su relación con las residencias para personas mayores
Esta Ley mantiene una relación directa con las residencias de personas mayores. En ella se establece un abanico de servicios y prestaciones establecidas para la asistencia, el cuidado y la atención de las personas en situación de dependencia; entre los que se encuentran los servicios de atención residencial.
Así mismo, la Ley contempla ayudas económicas que pueden vincularse a la financiación de una plaza en un centro de mayores. Estas prestaciones pueden abarcar el coste de la residencia de forma parcial o de forma total; en función del grado de dependencia del solicitante y de la capacidad economía de éste.
La Ley de Dependencia, junto con las leyes autonómicas, exigen a las residencias el cumplimiento de una normativa estándar de calidad. Con esta regulación certifican que el centro cuenta con los recursos necesarios para poder brindar una atención adecuada. Se aseguran también de que disponen de un entorno seguro y adaptado para las personas mayores dependientes.
En Colisée contamos con varios reconocimientos y certificaciones que ponen de manifiesto la gestión de la calidad de nuestro servicio y de nuestros centros para mayores. Entre ellos, destaca la normativa internacional ISO, una de las más reconocidas en todo el mundo. Esta certificación implica auditorías de forma regular, así como el cumplimiento de aspectos fundamentales como la excelencia en el cuidado, la seguridad y la formación continua de todo el personal.